Nuevos desafíos se avecinan. En el caso de ‘Bela’ serán incluso mayores porque su elección conlleva cambio de lado. Sí, así es, ‘el Rey’ vuelve al revés, donde mejor ha rendido y obviamente la posición en la que se siente más cómodo en la pista. Parecía que sus últimos días en ese lado habían pasado, pero no es así.

Fernando Belasteguín se cambia al elegir a Valentino Libaak, un jovencísimo jugador que tiene una proyección tremenda y que ya ha dejado enormes detalles de su calidad al lado de Leo Augsburger, asentándose en las previas y logrando llegar numerosas veces al cuadro final e, incluso, a pelear por un título, pues recordemos que el año pasado en el torneo de La Rioja de World Padel Tour ambos llegaron a esa instancia partiendo con un wild card, todo un hito.

Libaak había apostado por un nuevo proyecto junto a Víctor Ruiz, pero su unión no prosperó.

Así pues, Bela elige a un talento por pulir, un diamante en bruto muy joven (como ya hizo años atrás con Agustín Tapia o Arturo Coello) y viendo que los resultados en el drive no han sido los esperados, vuelve al lugar de sus éxitos. Con Libaak tendrá mucho control de juego (tiene cualidades de drive clásico como Di Nenno o Chingotto), pero también la amenaza de la pegada, algo que ha exhibido en más de una ocasión.

Por su parte, como ya hemos anunciado, el elegido por Tello es Íñigo Jofre, jugador valenciano con el que buscará no solo regularidad, sino también tranquilidad y un proyecto a largo plazo, para lo que necesitará resultados importantes, algo que le ha faltado en los últimos tiempos tanto con ‘el Boss’ como con Paquito Navarro y con Álex Ruiz.

Las dos nuevas parejas tendrán su debut en el Major de París, en Roland Garros (del 28 de septiembre al 6 de octubre), un desafío enorme al que deberán llegar lo más preparados posible. Veremos cómo se les da y cómo se desenvuelve Bela teniendo que imponer su físico en la pista al volver al revés.

Fuente: Pádel Spain.