Victoria Marsero, una de las atletas de nuestra ciudad que participo en la Media Maratón de Buenos Aires, se refirió -en una nota que le hicieran nuestros colegas de FM del Sol- a su regreso a las competencias tradicionales de calle, luego de varios años dedicada especialmente a las carreras de montaña.

EL OBJETIVO DE LOS 42 KILOMETROS

“Este fin de semana estuve corriendo la Media de Buenos Aires, había participado dos veces, pero hacia 7 años que no corría una carrera de 21 kilómetros de calle, porque en lo que más me especifico es en las carreras de montaña. Pero este año decidí bajarme un poco de la montaña y preparar la Maratón de 42 kilómetros de Buenos Aires y estoy enfocada en eso. Esta carrera del fin de semana fue para meterme en el ritmo de la calle para luego ir a los 42, que se correrán el 24 de septiembre. La verdad que llegué muy bien, tardé 1 hora y 30 minutos, corrí al ritmo que tenía planificado, me sentí muy bien y terminé feliz, aunque aprendiendo a sufrir porque la calle para mantener un ritmo alto no hay que relajarse, la montaña te da otro respiro, tiene otra pausa y es diferente. Me quedaron muy buenas sensaciones y estoy muy focalizada en los 42 kilómetros de calle”

PASION POR LA MONTAÑA

“El año pasado participé de la meca de las carreras de montaña que es el Ultra Trail de Mont Blanc, hice 170 kilómetros con 10.000 metros positivos. Es la carrera a la que cualquier corredor de montaña quiere llegar alguna vez en la vida, por eso lo recuerdo con mucha emoción y todo mi recorrido fue para llegar ahí”.

“Empecé a correr buscando un deporte que me diera libertad en mis tiempos y poder hacerlo cuando yo quisiera. De chica odiaba correr, pero de más grande me propuse empezar a correr. Lo hice por primera vez en una carrera de 5 kilómetros de Buenos Aires y me encantó"

"Empecé a correr cada vez más kilómetros, luego me anoté en un grupo de running y el profesor era muy fan de la montaña. Nos propuso hacer una carrera en las sierras y cuando fui dije ‘de acá no me voy más’, me encantó. Tiene una adrenalina de las subidas y bajadas, combina la naturaleza y los viajes, es muy entretenido. Es algo diferente”

“En el exterior también corrí en Chile, una carrera que me dio puntaje para ir a la UTMB, fue una carrera muy difícil de 100 millas. No se hace más, pero es una de las carreras más duras que había en la zona, así que me siento orgullosa de haber participado”; señaló en diálogo con FM del Sol.